La venus tatuada

Escondía mensajes, dibujos y sueños en su piel. Se había convertido en un lienzo para los artistas del pueblo. Todos querían inyectar tinta en esa piel blanquecina tan cotizada. Una vez que no quedo espacio para la creatividad de los expertos pintores, su cuerpo fue quien comenzó a crear su propio arte. Con arrugas, marcas, pecas y lunares, toda ella se convirtió en una obra llena de talento, virtud, ingenio y aliento.

Fotografía de Betty Broadbent - La Venus tatuada

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