Retraso

Que me obliga a perder trenes, vuelos, besos y sueños. Retraso que condiciona mis pasos, siempre rápidos y enojados. Que me empuja a la locura, al llanto desconsolado. Que me deja sola, asustada y que me impone observar cómo se fuga el tiempo entre mis dedos, el dinero de mis bolsillos y la calma y la certeza se convierten en puro espejismo. 

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